El pesar puede manifestarse en muchas formas que, en poco, se parecen a una profunda pena.
No solo sentimos pesar por la muerte, también por la vida, por la pérdida, por el cambio. Cuándo nos preguntamos a veces por qué todo es un asco, por qué duele tanto, debemos recordar que todo puede cambiar en un instante.
Recordando el día, en que sin saber cómo, y aunque parezca imposible no te sentías así, no te dolerá tanto.
El pesar le llega a cada uno a su hora, a su manera, y lo mejor que podemos hacer -lo mejor que cualquiera puede hacer- es ser sincero.
Lo peor del pesar es que no puedes controlarlo. Lo mejor que podemos hacer es permitirnos sentirlo cuando llega, y liberarnos de él cuando podamos.
Lo peor es que cuando crees que lo has superado, vuelve otra vez.
1 comentario:
"Así sigues viviendo. Cuando te duele tanto que no puedes respirar, así sobrevives. Recordando el día en que, sin saber cómo, y aunque parezca imposible, no te sentías así, no te dolerá tanto." Ains, me encanta este texto. Felicidades por el blog!!
Un besito :)
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